Las empresas son un reflejo de su activo humano. En el Día Internacional de los Recursos Humanos (20 de mayo), una reflexión sobre el rol que cumplen las áreas de gestión del talento en el reclutamiento, desarrollo y retención de colaboradores que generen valor.
La guerra por el talento es una realidad actual. Las organizaciones han descubierto que las personas que las conforman son quienes generan el valor agregado que las diferencia, son ellas quienes crean los productos y/o servicios, quienes optimizan los procesos y quienes aportan su ingenio y creatividad. Por ello deben atraerlas, retenerlas y desarrollarlas, para que la organización a su vez también pueda crecer.
El mercado laboral es cada vez más exigente no solo para los postulantes sino también para las organizaciones, que buscan fortalecer su imagen y tener una marca empleador potente-atractiva que logre que el talento toque a su puerta. Las organizaciones que alcanzan este nivel son referentes en sus sectores y no solo son reconocidas por sus clientes externos por sus productos y/o servicios, sino que ellos a la vez quieren convertirse en colaboradores.
Uno de los cambios más notorios en la gestión de empresa es que el área de recursos humanos ha dejado de ser un órgano pasivo al que principalmente se le asignaba labores de registro, y ha pasado a ser un órgano proactivo que da soporte con enfoque de servicio a todas las áreas para alcanzar los objetivos estratégicos, es decir, han cobrado una vital importancia en las empresas.
La gestión de personas busca con sus procesos generar el ambiente ideal para el desarrollo de los colaboradores, de modo que alcancen un éxito profesional y personal. Para lograrlo primero debe hacerse reclutamiento, es decir, atraer a postulantes a iniciar un proceso de selección para ser parte de la empresa. Luego de ello ser el filtro para permitir el ingreso de talento que fortalezca la cultura organizacional. Los procesos de capacitación y desarrollo permiten cerrar las brechas entre el perfil actual de los colaboradores y el perfil deseado. Los procesos de administración de personal y compensaciones sientan las bases que organizan al talento y lo retribuyen. El proceso de bienestar social procura ser el acompañamiento del colaborador, potencia los canales de comunicación y fomenta actividades que generan compromiso organizacional.
Todos los procesos de gestión humana han encontrado en la tecnología una aliada que permite dejar de lado aquellas tareas operativas que quitan tiempo y recursos, y con ello poder concentrarse en los procesos que enriquecen y generan valor en el presente, y que también representará un valor futuro gracias a la sostenibilidad.
El área de talento humano es ahora un socio de la gerencia general, y la situación de pandemia en la que se encuentra el mundo actualmente ha brindado mayor protagonismo a los gestores de talento, pues es hacia donde han volteado las gerencias buscando soluciones innovadoras.
Este 20 de mayo se celebra el Día internacional de los Recursos Humanos que busca revalorar al activo mas importante al interior de las organizaciones. Si te interesa ser un profesional en la gestión del talento, te invitamos a conocer la carrera de Administración y Gestión del Talento Humano que ofrece nuestra universidad.
*Este post es una colaboración de Ornella Lambruschini Tafur, coordinadora de la carrera de Administración de la Universidad Privada del Norte.
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