Mario Mendoza, un ingeniero industrial enfocado en dar solución a los problemas

Para nuestro egresado existen diferentes formas de afrontar y dar solución a un problema. Tomando la mejor decisión también será posible dar continuidad a un proceso de mejora constante.

Seguro de que su formación profesional le permitiría contribuir con la solución de problemas, Mario Mendoza no dudó en elegir nuestra carrera de Ingeniería Industrial. “Fue una de las principales motivaciones que tuve para convertirme en ingeniero industrial. Y es que siempre tendremos diferentes formas de poder afrontar un problema y también de poder solucionarlo. Es así como podemos optar por la solución más conveniente y seguir en proceso de constante mejora”, expresa.

Desarrollo profesional para innovar, liderar de manera eficiente y actuar proactivamente

Jefe de Operaciones CDA (Centro de Distribución de Almacenes) en Saga Falabella Perú, Mario considera que en un mundo de cambios constantes no podemos detenernos en lo concerniente al desarrollo profesional, ya que “mercados competitivos en todos los ámbitos requieren de profesionales que puedan seguir innovando, liderando equipos de manera eficiente y actuando de manera proactiva”.

Estos son algunos de los principales rasgos que guían las acciones de nuestro egresado y que él adjudica a su paso por UPN. “La universidad es una gran etapa de nuestra vida y formación profesional”, manifiesta, y acota que “los distintos proyectos realizados en esta etapa son guías que nos permiten amoldarnos a todos los ámbitos en que nos podamos desempeñar, tomando decisiones acertadas y generando soluciones”.

El máximo esfuerzo para alcanzar objetivos y metas

También hace suya y comparte la filosofía del máximo esfuerzo para lograr objetivos y metas. “Muchas veces nos sentimos agotados y pensamos que ya no podemos más, pero cada paso que damos cuenta y vale mucho”. Por ello, recomienda a quienes quieran trazar una carrera exitosa no retroceder ni parar si están encaminados hacia un objetivo o una meta y procurar alcanzarla con constancia y perseverancia creyendo en el propio potencial.

“UPN es mi alma mater y siempre estaré agradecido por la formación académica que recibí en sus aulas. Sé además que nuestra universidad está dispuesta en todo momento a potenciar nuestra cualidades y capacidades profesionales”, concluye.

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