Nuestros estudiantes y egresados que viajan al extranjero para complementar sus estudios u obtener una doble titulación son cada vez más. Mily Churango, quien estudió la carrera de Ingeniería Industrial, nos relata en las siguientes líneas vivencias de su estadía en Brasil.
Una de las mejores experiencias que he tenido hasta el día de hoy es el intercambio que realicé por un año y medio en la Universidad Anhembi Morumbi.
Si bien es cierto todo lo nuevo provoca miedo y causa incertidumbre, los beneficios de un intercambio académico hacen que cada esfuerzo valga la pena. No solamente tuve la oportunidad de realizar estudios y poder egresar de la carrera de Ingeniería de Producción en Brasil, sino que también efectué prácticas profesionales en una empresa de ese país.
Un intercambio sin lugar a dudas te da un valor agregado, no solo en el ámbito profesional sino sobre todo en el terreno personal. Te brinda la posibilidad de sumar conocimiento, te abre nuevas puertas, puertas hacia una cultura diferente. Asimismo, podrás tener la oportunidad de trabajar en una empresa extranjera y de conocer personas maravillosas, y no menos importante es que todas estas vivencias te permiten conocerte a ti mismo y saber que con mucho esfuerzo y voluntad es posible lograr todo aquello que te propongas.
*Este post es un tesmimonio de Mily Churango Barreto, egresada de la carrera de Ingeniería Industrial de la Universidad Privada del Norte.
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