Hace poco más de un año la campaña del Ice Bucket Challenge con el propósito de reunir fondos para la lucha contra la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ALS por sus siglas en inglés) fue un éxito alrededor del mundo y recaudó millones en donaciones. Todo esto pese a que no hubo de por medio estrategias de comunicación ni un presupuesto abultado de marketing.
En opinión de los expertos, la campaña obtuvo grandes resultados y se convirtió en viral debido a que hubo una transmisión personal de la idea y a todos las gustó. El desafío consistió en lograr que la gente hiciera un donativo o de lo contrario se vaciara un balde de agua fría sobre el cuerpo. Sin embargo, la mayoría de las personas terminaron haciendo las dos cosas.
De esta manera, lo que funcionó bien en esta campaña fue que, aparte de ser una gran causa, todos encontraron un rol que jugar. Quienes participaron compartieron lo que habían hecho y buscaron ser preguntados por la experiencia.
Al respecto Patti Johnson, colaboradora de Entrepreneur, refiere que la experiencia del Ice Bucket Challenge deja una pauta instructiva de cara a futuras cruzadas similares. Esto porque el desafío respondió acertadamente a las siguientes preguntas: ¿Cómo logramos que la gente se interese y tenga expectativas por este tipo de causas? ¿Cómo logramos que la gente se involucre en un trabajo que trasciende? ¿Cómo conseguimos que se interesen por los productos o servicios que ofrecemos?
Queda claro que podemos conversar sobre nuestra próxima gran idea. Pero las ideas sólo se expanden cuando las personas verdaderamente quieren unirse a ellas.
En función a ello, Johnson sugiere cuatro conductas “infecciosas” que podrían ayudar a diseminar la idea.
Piense más allá de usted
Para que una idea tome cuerpo, su “por qué” debe ir más allá de usted mismo y de su negocio. Dado el propósito de convocar el compromiso de las personas, es necesario sostener argumentos que hablen de un proyecto de gran alcance.
Comunique sólo una porción del “por qué”, de manera que la gente no lo ignore
Un estudio reciente de Microsoft encontró que el nivel promedio de atención humana decreció de 12 a 8 segundos entre 2000 y 2013. De modo que si quiere provocar atracción hacia su idea tiene que hacerlo rápido. La manera más afectiva de hacerlo es enfocando el mensaje en un “por qué” pegador en lugar de dar explicaciones concienzudas.
Encuentre a los constructores laboriosos del “momentum”
Como emprendedor, usted podría caer en la trampa de la autosuficiencia. Desde luego, el negocio y la idea son suyos, pero si lo que necesita es expandir la idea no podrá hacerlo solo. Por ello una prioridad es identificar a aquellos colaboradores que verdaderamente tienen el poder de movilizar las causas.
Efectúe conexiones reales
Por estos días incluso las mascotas tienen historias. Instagram, por ejemplo, presenta los casos de mascotas que requieren de adopción y mucha gente contribuye armando foto álbumes que capturan la personalidad de los animales para que puedan encontrar pronto una casa.
Este tipo de conexiones reales anima a la gente a confiar en los proyectos y ciertamente son más efectivas porque energizan e inspiran las primeras peticiones. Además, los estudios muestran que conversaciones cara a cara generan mayor confianza que un email o video conferencia. Procure por tanto que sus conexiones cuenten.
Fuente:
http://www.entrepreneur.com/article/247794
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