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Ante el avance de la tecnología y el crecimiento de los medios digitales, resulta imprescindible comprender la analítica de datos para llevarla a la realidad del negocio.
Hoy la analítica de datos es una de las herramientas más importantes en el desarrollo de una decisión de negocio. Tal como dice la frase “la analítica sale al rescate cuando la intuición no es suficiente”, los profesionales del siglo XXI no pueden confiar exclusivamente en su experiencia, sensaciones, intuición o el famoso “olfato” de negocio.
A medida que las condiciones en el mercado van cambiando, ya sea por efectos naturales, económicos, políticos o medioambientales, las organizaciones tendrán que resolver permanentemente una pregunta clave a través de la información: ¿qué quiere mi cliente? Para responder, las empresas deben saber administrar información de sus negocios tales como características demográficas, estadística de contacto y respuesta con la empresa (compras), datos de ubicación, manifestaciones en redes sociales, información en línea, etc.
El poder generar una cultura de analítica de datos en la organización podría presentar grandes beneficios:
A través de la analítica de datos es posible poder determinar patrones de consumo que se establecen mediante un seguimiento a las compras, preferencias, compras cruzadas, etc. y de esa manera poder conocer y determinar el producto correcto, en el lugar correcto y al precio correcto.
Mediante las diversas técnicas estadísticas aplicables en la analítica de datos, podemos perfilar de una mejor manera los diferentes segmentos de mercado a los que intentamos llegar y, por otro lado, nos permitirá poder detectar nuevos grupos de clientes con características particulares.
La información que hoy los consumidores dejan a su paso en redes sociales es fundamental para cualquier empresa que tenga interés en conocerlas a mayor profundidad. Los insights de los consumidores y sus aportes más sinceros pueden ser analizados, obteniendo información sumamente relevante para las decisiones que se deban de tomar.
Dentro del equilibrio que se debe generar entre la importancia del cliente y la empresa, la analítica de datos nos permitirá conocer de una manera mucho más exacta en qué medios obtenemos un mejor retorno sobre la inversión (ROI) respecto a canales de venta, inversión en publicidad offline y online o herramientas promocionales, generando así un uso óptimo de los recursos de la empresa.
Una de las preguntas más frecuentes en los negocios es ¿qué pasaría si? Hay que tener en cuenta que la analítica de datos nos da la posibilidad de generar modelos de predicción que simulen situaciones de negocio, teniendo en cuenta variables de distintas índoles que permitirán que las empresas tomen decisiones respecto a planes de contingencia y establezcan estrategias para contrarrestar escenarios negativos y aprovechar los positivos.
Muchas empresas en el país han adoptado “la mentalidad” de la analítica de datos, esto no solo debido a la gran cantidad de información con la que cuentan día a día sobre sus clientes, el mercado y el contexto, sino también porque se ha aceptado que la información hoy en día es una ventaja competitiva.
Algunas otras empresas aún mantienen una pasividad respecto a la analítica de datos, ya que cuentan con muchísima información, pero el accionar sobre ella aun es nulo. Estos negocios deberán ser conscientes que el cliente cambia muy rápido y va dejando “huellas” (datos) de esos cambios.
Así, resulta clave (con el objetivo de prevalecer y crecer) que las organizaciones adopten esa mentalidad de analítica de datos y puedan dar soporte real a cada una de las decisiones que tengan que tomar; ofreciendo lo mejor para el cliente para generar mejores resultados a la organización.
*Esta nota es una colaboración del docente de la Escuela de Posgrado Jaime Briceno Morales de la Universidad Privada del Norte.
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