Que el desarrollo tecnológico ha cambiado de manera sustantiva los modos de vida de la gente no representa mayor novedad. Sin embargo, la rapidez con que se viene dando esta evolución en años recientes ha generado especial atención en torno al tema, al punto que la cita anual del World Economic Forum (WEF), celebrada hace unos días en Davos, tuvo como tema de fondo la gestión de la llamada “Cuarta Revolución Industrial”.
En el mismo sentido, un artículo del MIT Sloan Management Review propone que el mundo de los negocios se está digitalizando a gran velocidad, derribando barreras contra la industria y creando nuevas oportunidades mientras destruye modelos de negocio que han sido exitosos por mucho tiempo. Este proceso es denominado disrupción digital, y si bien los procesos de cambio tecnológico suelen darse en un tiempo mayor al esperado, la historia muestra que el impacto de tales cambios podría ser mayor al previsto.
Piense en motores a vapor, autos, aviones, televisores, teléfonos y últimamente en teléfonos móviles y libros electrónicos. Con los e-books el mercado se desarrolló lentamente y las voces tradicionalistas señalaron que no podrían reemplazar a los libros de papel. Pero los e-books han ganado terreno y son más baratos que los libros de papel, mientras que los procesos de búsqueda y compra son más rápidos. Aun cuando los márgenes de utilidad son menores a los de los libros tradicionales, el mercado continúa creciendo. En 2014, 28% de adultos americanos leyeron un libro electrónico, un 17% más en comparación a tres años antes.
Dadas las transformaciones que está causando la disrupción digital, es momento de que las compañías evalúen los nuevos mecanismos y oportunidades en función a crear nuevas opciones para el futuro –un futuro más conectado de ecosistemas digitales. En esto están de acuerdo los directivos de las grandes corporaciones.
En un estudio realizado por el MIT Center for Information System Research, los directivos estimaron que un 32% de los ingresos de sus compañías estarán bajo la amenaza de la disrupción digital en los próximos cinco años, en tanto un 60% de ellos sienten que deberán dedicar más tiempo a este tema el próximo año. Como los fenómenos disruptivos de mayor impacto fueron identificados Uber (taxis disruptivos) Airbnb (hoteles disruptivos), Apple Pay, Kabbage, Venmo y otros bancos disruptivos y Amazon (que ha devenido en una librería disruptiva y en un minorista de varios otros productos).
En la otra mano, la creciente digitalización también ofrece oportunidades. Gracias a ella las compañías pueden construir relaciones más sólidas con sus clientes e incrementar la posibilidad de ventas cruzadas.
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