Desde comer bien hasta hacerte masajes, ten en cuenta estas recomendaciones para obtener el mejor entrenamiento posible a la vez que haces del ejercicio una experiencia saludable.
Realizar una rutina de ejercicios de manera sistemática y regular otorga innumerables beneficios a nuestro organismo y salud mental, previniendo incluso algunas enfermedades. Sin embargo, es necesario llevar a cabo una serie de acciones y elecciones previas, que contribuirán con un mejor resultado y evitarán posteriores lesiones o daños a la salud.
Al menos una hora antes de tu entrenamiento debes alimentarte bien para proveer a tu organismo de las energías que necesita para tener un buen desempeño durante tu rutina de ejercicios.
Es importante recargar energías para poder realizar las actividades deportivas. Antes de ejercitarte, come un bocadillo o una comida pequeña, especialmente una que contenga carbohidratos y proteínas. Los hidratos de carbono te dan la energía que necesitas para resistir durante tu entrenamiento. Abastecerse de frutas y granos, como avena y cereales, también es buena idea, ya que estos son fuente de carbohidratos, son livianos y te proporcionan energía.
Para cada actividad física hay una vestimenta adecuada. Una vez que tengas definido el tipo de deporte o entrenamiento que vas a realizar, debes asegurarte de escoger la ropa que se adapte a la actividad en aras de funcionalidad, comodidad y durabilidad. Generalmente, se trata de ropa a medida, no muy holgada o ajustada, con material de fibra que garantiza que el cuerpo permanezca lo más seco posible y con la suficiente ventilación para evitar un sobrecalentamiento.
Ésta es una práctica habitual en los atletas profesionales para tener mayor eficacia en los músculos. Si eres una persona activa físicamente, a modo de mantenimiento puedes considerar realizarte masajes cada dos semanas para mantener el nivel de elasticidad de los músculos.
Utiliza tus manos o rodillos de espuma para eliminar los nudos en los tejidos. Al realizar un masaje en todo el cuerpo evitas las roturas de los tejidos musculares. Además, como un post entrenamiento se pueden aplicar masajes de descarga, es decir este masaje contribuye con la eliminación de residuos, toxinas y activa la circulación habitual en reposo de la sangre por todo el cuerpo.
Una de las causas más frecuentes de lesiones, dolores o molestias en músculos y articulaciones se debe a la falta de calentamiento previo. Por ello, 15 minutos antes de iniciar la rutina debes necesariamente calentar el cuerpo mediante una serie de movimientos suaves para despertar tus músculos antes de cualquier actividad física, saltos, sentadillas, etc.
La hidratación previa a la realización de ejercicios es vital, ya que el agua ejerce una función termorreguladora, evitando el aumento de la temperatura central del organismo.
Cuando se somete el cuerpo a alguna actividad física, este pierde agua corporal a través de la sudoración. En este sentido, es importante dotar al cuerpo de reservas de agua para compensar la pérdida de líquido que tendrá durante el ejercicio físico.
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Fuentes:
Vix, Salud. “Cuatro cosas que debes hacer antes de entrenar”. https://www.vix.com/es/imj/salud/6225/cuatro-cosas-que-debes-hacer-antes-de-entrenar
Alimentos para antes de entrenar: Cuáles consumir (y cuáles evitar). https://www.atletas.info/nutricion/alimentos-para-antes-de-entrenar/
Sportadictos. “El masaje deportivo, para qué, por qué y cuándo aplicarlo”. https://sportadictos.com/2012/11/el-masaje-deportivo-aplicacion
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