La evolución de la especie humana se halla ligada al deseo constante de crear condiciones de vida superiores. El ámbito económico no ha sido ajeno a este proceso y desde los sistemas que entendían al hombre como una pieza más del engranaje productivo hasta nuestros días, es mucha el agua que ha corrido bajo el puente y varios los cambios positivos que se han dado.
Aaron Hurst, CEO de Imperative, fundador de Taproot Foundation y autor de The Purpose Economy (La Economía del Propósito), sostiene en su libro que en los últimos años la economía está dando una vuelta de tuerca hacia un enfoque y acción en las personas; vale decir, en sus empleados, sus clientes y en todo aquel que pueda ser partícipe de un beneficio. Desde la perspectiva de este consultor y conferencista, soñar en torno a la forma en que hacemos nuestro trabajo está transformando vidas y las comunidades se convertirán en poderosos imanes para atraer inversiones.
De esta manera se adquirirá rentabilidad pero no solamente desde una lógica monetaria, sino desde una actitud basada en valores y en una visión centrada en la protección de las personas y el planeta. Así las cosas, nos asomamos ante la primera economía de la historia moderna construida para los seres humanos.
La tesis central de Hurst es que el propósito –hacer las cosas con un sentido- se ha convertido en el centro de la ambición humana a partir de sucesivas crisis que han modificado nuestra forma de entender el mundo y las relaciones personales.
Al influjo de esta tendencia existen compañías que posibilitan trabajos que enriquecen a las personas e incluso grandes corporaciones como Pepsi o Deloitte se encaminan hacia estrategias enfocadas en las protección del medioambiente o la alimentación saludable, detrás de lo que hay siempre un objetivo humano.
Hurst plantea que la economía del propósito es hoy un imperativo empresarial como lo fue en su momento la economía de la información. Por lo tanto, una compañía sin un propósito para sus empleados y consumidores es tan impensable como una que en los años 90 no hubiera adoptado los nuevos avances tecnológicos. El autor subraya que en el mundo actual hay que permitir a las personas alcanzar su propósito de vida, pues las cuestiones materiales, una vez logrados ciertos niveles de confort, pasan a un segundo plano en las aspiraciones de las personas.
Aaron Hurst será uno de los expositores principales del fórum Wobi on Leadership 2016: Propósito, que podrá ser visto por la comunidad UPN este 24 y 25 de agosto. Conoce la agenda completa del forum aquí.
Fuentes:
Esade, Ramón Llull University | ESADEgeo – Center for Global Economy and Geopolitics
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