Hard y soft skills, complementos ideales en profesionales de ingeniería
Hoy en día, vivimos en un mundo globalizado, acelerado, que se caracteriza por un constante cambio. En este escenario, el gran reto que se presenta es la formación de profesionales de ingeniería que tengan las competencias requeridas para enfrentar este entorno.
En los diferentes comités consultivos en los que he tenido la oportunidad de participar como Decano de la Facultad de Ingeniería, la constante ha sido siempre: “los empleadores consideran que los profesionales de ingeniería deben tener bien consolidadas las competencias soft y hard skills, pero le dan mayor importancia a las primeras, pues precisan que son las menos desarrolladas”.
Por un lado, las competencias hard están referidas a los conocimientos técnicos que posee el profesional y que son propias de la especialidad. Por ejemplo, un ingeniero civil debe conocer sobre pavimentos, un ingeniero de minas debe conocer sobre voladuras, por citar algunos ejemplos. Mientas que las competencias soft comprende el aspecto “actitudinal” que es de naturaleza intangible y está relacionado con la personalidad del individuo.
Edelberg (2007) indica lo siguiente: “hard skills son las habilidades requeridas para llevar a cabo una determinad tarea, adquiridas por medio del entrenamiento y la educación o aprendidas en el trabajo. Soft skills, son la suma de características de la personalidad, desenvolvimiento social, habilidades en el lenguaje, camaradería y optimismo que nos identifica a cada uno de nosotros”. (1)
Una de las herramientas que permiten desarrollar estas competencias soft en los futuros profesionales de ingeniería son los “simuladores”. Un simulador es una máquina o software a través del cual se puede reproducir el comportamiento de un sistema en determinadas condiciones, lo que permite entrenarse a la persona o personas que utilicen dicho sistema. Estos simuladores tratan de ser lo más cercanos a la realidad.
A través del uso de simuladores en la formación de los futuros ingenieros, los estudiantes son expuestos a situaciones casi reales, a las que se deben enfrentar de manera individual o en grupos conformados previamente, y deben tomar una serie de decisiones. De esta manera, podemos desarrollar en ellos ciertas capacidades como: trabajo en equipo, empatía, liderazgo, capacidad de análisis de problemas, tolerancia al estrés, capacidad crítica, creatividad, adaptabilidad, entre otros.
(1) Edelber,G (2007). Hard skills y soft skills: ¿conflicto o complemento? Consultado en mayo de 2014 en http://www.guillermoedelberg.com.ar/pdf/92.pdf
*Este post es una colaboración de Oswaldo Sifuentes, decano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Privada del Norte.